viernes, 8 de marzo de 2019

LA OBSOLESCENCIA DEL TRABAJO TAL COMO LO CONOCEMOS y la dinámica de las fuentes laborales


LA OBSOLESCENCIA DEL TRABAJO TAL COMO LO CONOCEMOS
Y LA VISIÓN DE LOS MODOS DE PRODUCCIÓN

La robótica, la revolución científico-técnica y la desaparición de las fuentes laborales



   Uno de los factores fundamentales en el surgimiento del capitalismo, conjuntamente con el empuje de los empresarios surgentes de los burgos pre renacentistas, los banqueros y los grandes comerciantes, aun bajo las coronas europeas, fue la aplicación de los conocimientos científicos en las máquinas para manufacturar y trasladar los bienes de uso (producción en serie y los nuevos medios de transporte). El otro factor fundamental, fue el uso de la mano de obra en la producción en masa, como mercancía de la que se extrae ganancia hasta el día de hoy.

   Dicho con otras palabras: En el surgimiento del capitalismo tenemos el empuje de una nueva clase social que surge de la transformación del producto manufacturado hacia la nueva industria, la multiplicación a escala planetaria del transporte de productos de intercambio y su columna vertebral en la organización y acumulación que encontramos en el surgimiento de la banca (relacionados en diferentes formas, lo llamamos capital financiero). A esto se le suma la necesidad del aumento de la producción, con el auxilio del avance del conocimiento científico técnico que fue aplicado al desarrollo de la maquinaria industrial y de transporte. Sin olvidar el cimiento donde se apoya toda esta ecuación, la compra masiva de trabajo, la mano de obra de los trabajadores: la otra nueva clase social que surge como contrapartida a la burguesía. 

   Desde los orígenes, cada avance de la maquinaria evoluciona para producir más, en menos tiempo y con menos trabajo humano. Anteriormente eran, el maestro artesano y su discípulo en el precario taller del burgo medieval, luego vinieron las primeras grandes máquinas manufactureras. 
   
  Entonces la tecnología también cumple el rol de sustituir la mano deobra del trabajador, pero ademàs, vemos que esta causa en el el problema de la obsolescencia de algunos tipos de trabajos y la multiplicación de la producción en serie, realizada por menos personas, no nace hoy en dìa, es un tema antiguo. 
   A pesar de ello debemos reconocer que en las décadas recientes ingresamos en una etapa de aceleración, en la que el aumento de la población mundial (actualmente supera los siete mil quinientos millones de habitantes), abasteciendo sus necesidades con bienes y servicios resueltos por una tecnología en crecimiento exponencial, junto al desarrollo de la inteligencia artificial, substituyendo cada vez más al hombre por la máquina y suprimiendo o transformando al trabajo tal como lo conocemos. En consecuencia, atenta cada vez más contra al número de fuentes laborales como tendencia general.

Dato importante constituye la necesidad de educarse para los nuevos puestos de trabajo, obligando al trabajador a "recalificar" actualizando permanentemente sus capacidades como el software de su ordenador, o las apps de su celular. 

 Sin embargo, en términos absolutos, el numero general de puestos de trabajo tiende a  disminuir.

   ¿Hacia dónde apunta la gráfica de este proceso a nivel planetario? En realidad depende del camino que tomemos como sociedad.

   En la década de los años 80 en el bloque socialista de Europa, cercano a su caída, ya se sentía la influencia de la robótica en la industria metalúrgica y automotriz en lo que refiere al problema del número de fuentes laborales. La solución al problema la veían muy simple, ya que el objetivo económico no era la renta del dueño de la empresa: “La reducción del horario de trabajo sería un beneficio para la clase trabajadora manteniendo las fuentes laborales, en lugar de la desocupación que traía la robótica en el mundo capitalista.”  (Para algunos, una de las razones porque debía caer este bloque sin dudas). 

   ¿A alguien se le puede ocurrir que los avances científico-técnicos logrados por el ser humano redundarían en beneficios para la humanidad? Algo así como las vacunas, antibióticos, procedimientos clínicos y otros avances en el terreno de la salud nos benefician a todos, ya que en un siglo duplicamos la esperanza de vida desde una media de 40 años a una media de 80 años aproximadamente, entre otras causas y otros beneficios.  Pero en materia laboral, en lo que se refiere a la obsolescencia de tipos de trabajo, puede que no andemos muy bien rumbeados a nivel general.

   Debemos decidir el camino a seguir: Si el avance de la revolución científico-técnica nos beneficia (con la reducción de la jornada laboral entre otras medidas junto a una promoción real de la capacitación para las nuevas tareas), o por lo contrario beneficia únicamente a la pequeña parte constituida por los dueños de la riqueza, junto a una pequeña selección de trabajadores que lograron mantener su puesto de trabajo.
Sobre este tema, en nuestro futuro se abren dos caminos, una bifurcación en particular en la no podemos tomar por las dos sendas al mismo tiempo, pero tampoco podemos NO tomar por ninguna de ellas, porque seguramente seremos arrastrados a la peor.  

   Un camino apunta al futuro de un mundo mejor, el otro (el que transitamos) apunta a la pobreza extrema de grandes masas de la población mayoritaria, expulsando de la sociedad a escalas cada vez mayores a millones de trabajadores y sus familias.

   Los dueños de la riqueza intentarán distraer nuestra decisión con subsidios o proponiendo tibiamente el estudio de nuevos cursos (que realmente debemos encarar) para las pequeñas cantidades de puestos de trabajos tecnológicos.  

   El estudio de las nuevas disciplinas laborales por parte de los trabajadores, lo debemos proponer y llevar a la práctica como una de las tareas prioritarias, tomando en cuenta que en las diferentes áreas del trabajo el tema avanza en modo diferente y heterogéneo. 

   Los derechos fundamentales como la salud, vivienda, educación o la vida serán solo una quimera inalcanzable para la gran mayoría de la población si nos equivocamos hoy sobre lo que vamos a hacer. Esto no quiere decir que estos temas estén resueltos en estos tiempos, la injusta distribución de la riqueza actual seguirá empeorando aceleradamente por todas las características de la actual base material, incluyendo las masivas pérdidas de fuentes de trabajo por el modo de aplicar el avance de la revolución científico-técnica. 

   Los trabajadores debemos actuar organizada y colectivamente en el problema de la alienación del trabajo y además en la pérdida del mismo. Para esto debemos distanciarnos, en lo que nos sea posible, de la hipnosis que nos propone la sociedad de consumo y actuar en nuestras organizaciones, tener protagonismo en el destino de la humanidad, de la que somos “los mayoritarios en todos los sentidos”.   
marzo  2019