lunes, 24 de noviembre de 2014

Lucy en el cielo de Etiopía con diamantes.

Gusto de una charla vulgar
cuando las estrellas acarician mi conciencia
y dejándome llevar por la peripecia
de las palabras que vienen y van
recuesto mis dolores en el lento movimiento del firmamento
tan parecido al que vio Lucy

Hoy sé que alguien le acarició el pelo
y su piel con el color y la vellosidad del bosque
se erizó con la briza de la sabana
hace más de tres millones de años.
©2014 G.B.


Se trata del esqueleto de una hembra de alrededor de 1 metro de altura, de aproximadamente 27 kg de peso (en vida), de unos 20 años de edad (las muelas del juicio estaban recién salidas) y que al parecer tuvo hijos, aunque no se sabe cuántos. Dotada de un cráneo pequeño, Lucy andaba sobre sus miembros posteriores, signo formal de una evolución hacia la hominización. La capacidad bípeda de Lucy puede deducirse de la forma de su pelvis, así como también de la articulación de la rodilla.

El nombre Lucy proviene de la canción «Lucy in the sky with diamonds» del grupo  The Beatles, que escuchaban los miembros del grupo investigador la noche posterior al hallazgo. 

Hasta 1977, la comunidad científica no tomó en consideración el hallazgo de Johanson y su equipo del International Afar Research Expedition. La revista Kirtlandia aceptó publicar el descubrimiento del nuevo homínido, al que sus autores asignaron el nombre científico de Australopithecus afarensis.3

Lucy fue descubierta por Donald Johanson,  en 1974 a 159 km de Adís Abeba, Etiopía.

1 comentario:

Guillermo Bernengo dijo...

Los australopitecos (Australopithecus, del latín «australis», del sur, y del griego «πίθηκος» pithekos, mono) son un género extinto de primates homínidos. Las especies de este género habitaron en África desde hace algo más de 3,9 millones de años hasta hace unos 2 millones de años, del Zancliense (Plioceno inferior) al Gelasiense (Pleistoceno inferior). La mayor novedad aportada por los australopitecos es que se desplazaban de manera bípeda. El tamaño de su cerebro era similar al de los grandes simios actuales. Vivían en las zonas tropicales de África, alimentándose de frutas y hojas. Existe consenso en que los australopitecos jugaron un papel esencial en la evolución humana al ser una de las especies de este género la que dio origen al género Homo en África hace unos 2 millones de años, el cual a su vez dio origen a las especies Homo habilis, H. ergaster y finalmente al hombre moderno, H. sapiens sapiens.1​